Las sesiones de brainstorming de la NASA deben de ser divertidísimas. O al menos, tremendamente muy originales. Lo decimos por su última idea: para poner a prueba las defensas de la Tierra, cogerán un asteroide del espacio y lo lanzarán contra la Luna para que empiece a orbitarla. Con esto, la Luna tendrá su propia Mini-Luna completamente nuevecita.
Y claro, cuando lo plantean así no se les puede llevar la contraria, que son la NASA. La misión está prevista para mediados de 2020, y es parte de un plan mayor: el ARM: Asteroid Redirect Mission (Misión de Redirección de Asteroides).
Una vez la nave espacial se haga con el asteroide, tardará unos seis años en colocar la roca en órbita alrededor de la Luna. A lo largo de todo el proceso irán aprendiendo los detalles sobre el movimiento de cuerpos celestes, para protegernos en caso de que algo llegue a acercarse más de lo debido a nuestra atmósfera.
Una de las tecnologías que se probarán en esta misión serán los propulsores eléctricos solares, una nueva forma de desplazarse por el espacio, que puede mover cantidades masivas de carga de una forma mucho más eficiente.
Ah, y la misión tendrá una segunda parte: mandar otra nave a la nueva Mini-Luna que orbita alrededor de la Luna de siempre, para taladrarlo y recoger muestras de la superficie.
Por Miguel Morales. CH noticias.