En la Antigüedad la canela era más valiosa que el oro y la plata. Sus
numerosos y grandes beneficios para la salud le dieron un valor más allá del
monetario, convirtiéndola en una de las especias más apreciadas y valoradas.
Escritos,noticias,poemas,Humor, música, pintura....Todo aquello que nos hace seguir y vibrar en nuestro día a día.
Escritos,noticias,poemas,Humor, música, pintura....Todo aquello que nos hace seguir y.
lunes, 24 de octubre de 2016
La canela
domingo, 16 de octubre de 2016
Miguel Hernández
ADIÓS,
AMOR...
Yo
sé que ver y oír a un triste enfada,
cuando
se viene y va de la alegría
cuando
un mar meridiano a una bahía
esquiva,
cejijunta y desolada.
Lo
que he sufrido y nada, todo es nada,
para
lo que me queda todavía
que
sufrir el rigor de esta agonía
de
abocarme y ver piedra en tu mirada.
Me
callaré, me apartaré (si puedo),
con
mi pena constante, instante, plena,
adonde
no has de oírme ni he de verte.
Me
voy, amor, me voy, pero me quedo,
pero
me voy, desierto y sin arena.
Adiós,
amor; adiós hasta la muerte.
(Miguel
Hernández)
domingo, 9 de octubre de 2016
El Principito
"Si vienes a las cuatro de la tarde,
comenzaré
a ser feliz desde las tres.
Cuanto
más avance la hora,
más
feliz me sentiré.
A
las cuatro me sentiré agitado e inquieto...
¡Descubriré
el precio de la felicidad!
Pero
si vienes a cualquier hora,
nunca
sabré a qué hora
preparar
mi corazón..."
"Lo
esencial es invisible a los ojos"
lunes, 3 de octubre de 2016
Alfonsina Storni
DOLOR
Quisiera
esta tarde divina de octubre
pasear
por la orilla lejana del mar;
que
la arena de oro, y las aguas verdes,
y
los cielos puros me vieran pasar.
Ser
alta, soberbia, perfecta, quisiera,
como
una romana, para concordar
con
las grandes olas, y las rocas muertas
y
las anchas playas que ciñen el mar.
Con
el paso lento, y los ojos fríos
y
la boca muda, dejarme llevar;
ver
cómo se rompen las olas azules
contra
los granitos y no parpadear;
ver
cómo las aves rapaces se comen
los
peces pequeños y no despertar;
pensar
que pudieran las frágiles barcas
hundirse
en las aguas y no suspirar;
ver
que se adelanta, la garganta al aire,
el
hombre más bello, no desear amar...
Perder
la mirada, distraídamente,
perderla,
y que nunca vuelva a encontrar;
y,
figura erguida, entre cielo y playa,
sentirme
el olvido perenne del mar.
-Alfonsina Storni-
Suscribirse a:
Entradas (Atom)